Los vuelos de deportación de inmigrantes en Estados Unidos aumentaron un 41% desde que inició el segundo mandato del presidente Donald Trump, publicó AP.
La agencia de noticias se basó en los datos recopilados por Tom Cartwright, ex funcionario financiero de J.P. Morgan que ahora vela por los inmigrantes y rastreó mil 214 vuelos relacionados con deportaciones el mes pasado, el nivel más elevado desde que comenzó esta labor en enero de 2020.
Las aerolíneas GlobalX, Eastern Air Express y Avelo Airlines son responsables del 80% de estas deportaciones y en sus funciones están transportar a los inmigrantes a otros aeropuertos para ser transferidos a vuelos internacionales o también los llevan a países de Centroamérica o México.
Además, Cartwright contabilizó 5 mil 962 vuelos desde que comenzó la actual administración de Trump hasta el mes pasado, lo que representa un aumento del 41% en relación al mismo periodo del año pasado, cuando solo hubo mil 721 operaciones.
Las cifras incluyen información de aeropuertos principales de deportación, pero no de terminales más pequeñas como el del Condado de King, también conocido como Boeing Field.
Desde enero, el activista también ha registrado 68 vuelos de deportación militares —18 solo en julio—, la mayoría con destino a la Bahía de Guantánamo, Cuba.
Debido a lo complicado de la labor, Cartwright y su grupo Witness at the Border cedieron este mes la responsabilidad a Human Rights First, que bautizó su proyecto como “ICE Flight Monitor”.
“Su trabajo aporta una transparencia esencial a las acciones del gobierno de Estados Unidos que impactan a miles de vidas, y constituye un poderoso ejemplo de rendición de cuentas impulsada por la ciudadanía en defensa de los derechos humanos y la democracia”, dijo Uzrz Zeya, director ejecutivo de la organización.
La Resistencia, organización sin fines de lucro de derechos de los inmigrantes en el área de Seattle, ha monitoreado 59 vuelos en Boeing Field y cinco en el aeropuerto de Yakima en 2025, superando su total de 2024, que acumuló 42 vuelos.
Sin embargo, no todos los vuelos son de deportación, muchos de ellos solo se dirigen hacia o desde centros de detención de inmigrantes o a aeropuertos cercanos a la frontera.
La Administración Federal de Aviación (FAA) permite a las aerolíneas bloquear datos como los números de cola en los sitios web públicos de rastreo de vuelos bajo el programa Limiting Aircraft Data Displayed (LADD), lo que puede complicar su seguimiento.
Los aviones con números de cola bloqueados ya no aparecen en sitios como FlightRadar24 o FlightAware, portales que los identifican como “N/A – Not Available” mientras se mueven en el mapa o permanecen en tierra. Tampoco se listan sus destinos ni horarios de llegada.