El sector de viajes y turismo de Europea ha expresado una firme oposición ante la propuesta de la Comisión Europea de elevar de 7 a 20 euros la tarifa por solicitud del Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes (ETIAS), que obligará a partir de finales de 2026 a los viajeros exentos de visa —provenientes de países no pertenecientes a la Unión Europea— a obtener una autorización electrónica antes de ingresar al espacio Schengen (incluye 29 países).
Las organizaciones firmantes, entre ellas Airlines for Europe (A4E), la Asociación Europea de Aerolíneas Regionales (ERA), la Asociación Europea de Turismo (ETOA), HOTREC y la Federación Europea de Turismo Rural consideran que el incremento propuesto es desproporcionado y va en contra del principio de accesibilidad que guió la creación del ETIAS, cuya tarifa original fue acordada en 2018 por el Parlamento Europeo y el Consejo como una medida razonable.
“Esta alza parece desalinearse con la intención original de los colegisladores”, señalaron en una declaración conjunta.
El bloque expresó que si bien el cobro puede parecer menor en relación con el costo total de un viaje, su impacto acumulado sobre las familias no es trivial, especialmente en un entorno en el que también se han encarecido otros componentes del turismo, como los impuestos por pernocta.
Además, cuestionan la falta de transparencia del proceso, al no haberse revelado si se consideraron tarifas alternativas de 10 o 12 euros, ni se ha ofrecido un desglose detallado que justifique el nuevo monto.
El uso de esquemas como la Autorización Electrónica de Viaje (ETA) del Reino Unido o el Sistema Electrónico para la Autorización de Viaje (ESTA) de Estados Unidos como referencia para justificar el incremento también es motivo de preocupación.
Según los firmantes, la estructura tarifaria del ETIAS debería responder a las necesidades operativas reales del sistema europeo, y no alinearse sin justificación legal con modelos ajenos que obedecen a contextos distintos.
Ante esta situación, el sector demanda tres acciones concretas: que la Comisión Europea publique una evaluación de impacto que respalde el aumento propuesto; que el Consejo y el Parlamento rechacen el monto de 20 euros en favor de una cifra proporcional y basada en evidencia y, por último, que cualquier excedente de recaudación del ETIAS sea destinado al fortalecimiento del sector turístico europeo, incluyendo infraestructura, capacitación y sostenibilidad, como parte del próximo Marco Financiero Plurianual.
Las organizaciones firmantes subrayaron que Europa debe mantener un equilibrio entre seguridad fronteriza y competitividad turística.
“La industria turística aporta ingresos clave para las economías locales. Cargar más costos a los visitantes sin una justificación clara es una medida contraproducente”, concluyeron.