Airbus lanzó un programa de recortes de costos y congelación de la plantilla general para apuntalar el rendimiento de su negocio principal de fabricación de aviones en 2024, esto sucede semanas después de verse obligado a recortar objetivos para la producción de aviones, según dijeron fuentes de la industria a Reuters.
Con el nombre en código LEAD, la iniciativa abordará un aumento en los costos por avión y problemas de productividad más profundos mientras el mayor fabricante de aviones del mundo se prepara para la eventual recuperación de su rival estadounidense Boeing.
Explicó que es posible que algunos puestos desaparezcan y se limite el número total de direcciones, pero la compañía no tiene previsto un plan de despidos convencional, según informó Christian Scherer, director general de la industria aeronáutica.
Los costos se examinarán “sin tabúes” pero no habrá ningún cambio de estrategia, añadió.
“En vista de la continua presión en la cadena de suministro, así como de la compleja situación económica general, es necesario concentrar nuestros esfuerzos en los fundamentos”, afirmó el portavoz.
Scherer predijo que la actual crisis corporativa e industrial de Boeing obligaría al principal rival de Airbus a “cambiar radicalmente para mejor”, indicaron las fuentes.
También llamó la atención sobre el constante ascenso de China como competidor con un fuerte respaldo estatal y un gran mercado interno.
Scherer, quien pasó de director comercial a director ejecutivo de fabricación de aviones en enero, culpó a “algunos de nuestros proveedores clave” por los recientes problemas de producción, pero reconoció que las principales actividades industriales de la compañía también se han quedado rezagadas, dijeron las fuentes.
El mes pasado, Airbus recortó sus pronósticos de entrega y desaceleró su aumento de producción, citando escasez de motores, interiores y algunas aeroestructuras. La medida se produjo después de un resurgimiento de problemas industriales reportados por primera vez por Reuters en mayo.
Se ha comunicado al personal el primer objetivo del programa LEAD, que es salvar 2024 en términos de entregas y costos, que se han ido desviando de su trayectoria presupuestada, dijeron las fuentes.
El proyecto también está diseñado para captar una mayor parte del crecimiento de la demanda de aviones de pasajeros y mejorar la eficiencia a largo plazo.
Junto con los aumentos planificados en la producción, la congelación de la plantilla general sugiere una ofensiva contra los puestos administrativos y algunos proyectos secundarios, dijeron las fuentes.
Al mismo tiempo que apunta a los empleos de oficina, Airbus también se ha enfrentado a un problema de ausentismo en sus fábricas, mientras la industria lucha por retener a los trabajadores tras la pandemia.
