El Primer Ministro de Portugal, Luís Montenegro, aprobó un decreto de ley que permitirá la reprivatización del 49.9% del capital social de la aerolínea TAP, informó la agencia EFE.
El mandatario explicó este jueves que hasta el 44.9% de participación de la empresa estará abierto a inversores y hasta el 5% a los empleados, aunque agregó que el gobierno contempla la posibilidad de suspender el proceso si no se reciben propuestas relevantes.
“La reprivatización es un objetivo que queremos que pueda asegurar que nuestra compañía aérea proteja el hub en Lisboa y el aprovechamiento de todas las infraestructuras aeroportuarias del país”, afirmó Montenegro.
Entre las infraestructuras que mencionó el Primer Ministro está el Aeropuerto Humberto Delgado y el de futura construcción, el Luís de Camões, en Alcochete, a unos 30 kilómetros de Lisboa, así como las terminales de Porto, Faro y de los archipiélagos de Azores y Madeira.
La capacidad de transporte de Portugal, su desarrollo económico, su competitividad y su proyección en el mundo, protegiendo las rutas “más estratégicas”, son otras de las metas de la reprivatización de TAP.
Otro objetivo es proteger el interés estratégico del país con una gestión de la aerolínea por parte de empresas o grupos que aporten competitividad y sostenibilidad, en un contexto internacional.
TAP es propiedad del gobierno portugués, que tiene actualmente en sus manos el 100% del capital tras aumentar su posición para salvarla después de los daños sufridos por la pandemia.
La operadora cerró el 2024 con un beneficio de 62.7 millones de dólares (mdd), casi el 70% menos que en 2023.
Los activos más atractivos de TAP son sus slots a Brasil, hacia los países africanos de habla portuguesa y Estados Unidos desde su centro de Lisboa, que el gobierno quiere mantener e incluso ampliar.
En octubre pasado se confirmó que ya existían negociaciones con tres grupos aéreos interesados en la compra de la aerolínea: IAG (donde están integradas Iberia y British Airways), Lufthansa y Air France.