La aerolínea australiana Koala Airlines se enfrenta a su mayor obstáculo hasta la fecha, ya que los representantes de la compañía comparecerán ante el Tribunal Supremo del estado de Victoria para hacer frente a una petición de liquidación presentada por uno de los acreedores de la aerolínea.
De esta manera, si no se presenta a la audiencia o no responde de manera sustancial a la petición, la naciente aerolínea podría enfrentarse al cierre y ser eliminada del Registro Australiano de Empresas Activas.
El acreedor, identificado en los documentos judiciales como Wealth Creation Ltd, presentó la solicitud ante la Comisión Australiana de Valores e Inversiones contra Koala Airlines Pty Ltd el 20 de diciembre de 2024, con una audiencia fijada para el 22 de enero de 2025.
Para ganar la demanda, Koala Airlines tendría que llegar a un acuerdo con el acreedor solicitante antes o posiblemente durante la audiencia misma o convencer al tribunal de que tiene fondos suficientes disponibles para saldar la deuda y continuar con sus operaciones, al menos en el corto plazo.
Sin embargo, dado que ya ha pasado un mes desde la presentación de la demanda sin que aparentemente se haya resuelto, cualquiera de los dos resultados parece improbable en esta etapa.
Koala Airlines se había propuesto retomar el testigo que Bonza dejó en abril de 2024, cuando esa aerolínea se declaró en quiebra y cesó sus operaciones.
La aerolínea propone operar una flota de aviones Boeing 737 MAX 8 en rutas troncales en todo el país, aparentemente enfrentándose al duopolio de Virgin Australia y el Grupo Qantas en el mercado interno australiano.
Según su sitio web, Koala Airlines fue fundada en 2018 por el veterano de la industria de viajes Bill Astling. En 2019, compró la aerolínea australiana más pequeña Desert Air Safaris para usarla como trampolín para comenzar a operar vuelos comerciales de pasajeros.
Con sede en la ciudad sureña de Melbourne, Koala Airlines espera iniciar operaciones en 2025 y, según la aerolínea, su estrategia diferiría fundamentalmente de los participantes anteriores en un mercado interno que ha estado dominado durante mucho tiempo por dos aerolíneas importantes.
La aerolínea añade que, si bien desde 1990 han entrado en el mercado muchas aerolíneas de bajo costo que se han centrado exclusivamente en ofrecer tarifas más baratas, lo que ha dado lugar casi exclusivamente a una competencia insostenible, esta adoptará en su lugar una vía más innovadora. Su objetivo es “crear un nicho único que mejore el panorama de la industria sin alterar los estándares existentes, creando un impacto duradero en la industria”.
Koala Airlines había intentado hacerse un hueco en un mercado que se ha convertido en una especie de cementerio de aerolíneas a lo largo de los años, con muchas compañías intentando dejar su huella en la escena de las aerolíneas nacionales de Australia sin éxito.
Aunque las víctimas más recientes fueron Rex y Bonza en 2024, los libros de historia están plagados de los restos de aerolíneas como Compass, Impulse, Ozjet, Strategic Airlines y Ansett, que han intentado establecerse en el mercado pero han fracasado.
