A mediados de noviembre, la armadora ATR asistió a la conferencia de la Asociación de Transporte Aéreo de Canadá (ATAC) en Montreal, dónde anunció sus esfuerzos para expandir su presencia en América del Norte.
Con ocho operadores que vuelan más de 50 aviones ATR en todo Canadá, estos turbohélices son elogiados por su capacidad para transportar pasajeros y carga a los destinos más desafiantes, volar donde otros aviones no pueden, servir en pistas cortas y sin pavimentar en ambientes fríos y ofrecer un salvavidas para las comunidades más remotas.
La conferencia ATAC brindó una gran oportunidad para conectarse con operadores actuales y prospectos comerciales potenciales en toda América del Norte, ya que vemos un gran potencial para que el ATR-600 reemplace flotas obsoletas, aprovechando los muchos beneficios de esta flota de última generación.
Destacó también sus menores costos de mantenimiento, mayor disponibilidad, mayor fiabilidad y bajos niveles de emisiones de CO2.
Equipado con el nuevo motor PW127XT, producido por Pratt & Whitney Canadá, el ATR 72-600 cuenta con una notable reducción del 45% en las emisiones de CO2 en comparación con aviones regionales de tamaño similar.
ATR también identifica a Canadá como un mercado prometedor para su próximo ATR 42-600S, diseñado para reducir las distancias de despegue y aterrizaje hasta 800 metros: el avión ideal para operar en condiciones difíciles en las numerosas pistas cortas sin pavimentar del país.
Esta conferencia de tres días brindó valiosos conocimientos y oportunidades de networking para que ATR fortalezca aún más su presencia en el mercado norteamericano, ya que creemos firmemente que tenemos el producto adecuado para conectar las regiones de Canadá y Estados Unidos de manera asequible, confiable y responsable, e impulsar sus actividades económicas.
