El Comité Ejecutivo del Sindicato de Trabajadores de la Industria Aeronáutica, Comunicaciones, Similares y Conexos de la República Mexicana (STIA) no voltea a ver a las mujeres sobrecargos que forman parte de las tripulaciones de cabina de Aeroméxico Connect, además de que, en el marco de la reorganización financiera de la aerolínea y los despidos inminentes de hasta dos mil 596 trabajadores, no responden ni crean un canal de comunicación con sus agremiadas, señalaron miembros del sindicato.
“Si el sindicato trabajara como debiera, la empresa no se aprovecharía tanto de los empleados. Las cartas están sobre la mesa para la aerolínea, pero nosotras estamos bastante molestas de que no nos pidan nuestra opinión por el hecho de ser un gremio de 645 mujeres y cuatro delegadas. Estamos dirigidas por cinco hombres que no quieren escucharnos”, señaló una fuente que solicitó el anonimato.
El Comité Ejecutivo de STIA está compuesto por Rubén Romo como secretario general, José Luis Martínez como director jurídico, Jorge Romo como secretario al interior y Jonathan Martínez Cerón como asesor de factor humano.
Grupo Aeroméxico planea el despido de 766 sobrecargos, de las cuales 150 trabajan en Aeroméxico Connect y están afiliadas con STIA. De este total, 77 sobrecargos levantaron la mano voluntariamente para dejar de formar parte de la aerolínea que ahora se encuentra en un proceso de reestructura operativa y financiera en Estados Unidos.
Aeroméxico y STIA eligieron a los 73 lugares restantes sin respetar las medidas escalafonarias, además de que algunas fueron seleccionadas bajo circunstancias sospechosas como el tener problemas con la administración gremial.
“En este caso, van a recortar a la número 1 del escalafón, que no tiene buena relación con la jefatura, a la número 11 que tampoco tiene buena relación con la jefatura o a la 13 que fue asesora y tampoco tiene una buena relación. Puede ser que sea al azar, pero qué sospechoso es que hay otras personas que no les toca”, indicó la fuente.
Asimismo, las 73 sobrecargos fueron citadas a una reunión este viernes 6 de noviembre en el Centro de Capacitación Alas de América, mejor conocido como CECAM, en donde se presume que se les informará sobre su despido de la compañía.
“La empresa jamás mandó un escrito en el que dijera que las personas citadas para el viernes van por un tema de liquidación. Nos enteramos porque nos dimos cuenta entre nosotras que 70 personas tenían agendadas para el viernes el mismo rol. Además, el martes en la noche aparecieron en el Sistema de Administración Tributaria las facturas de finiquito”, indicaron.
En este tema, STIA no ha brindado el apoyo que las sobrecargos buscan. “Han evadido las respuestas de todas las preguntas que hemos hecho, así como los correos electrónicos, los mensajes. Hay una falta grande de comunicación”.
Mensaje de Conesa aumenta la incertidumbre
Durante esta semana, el director general de Grupo Aeroméxico, Andrés Conesa, envió una nueva carta a sus colaboradores, en la que informó sobre los posibles despidos que se llevarán a cabo en la empresa como parte de la reorganización financiera.
Grupo Aeroméxico planea despedir, al menos, al 15% de su fuerza laboral, con respecto a 2019. Además de las 766 sobrecargos, la aerolínea también despedirá a 855 empleados sindicalizados que trabajan en operaciones de tierra, mantenimiento, ventas, carga y 975 empleados no sindicalizados de áreas diversas como marketing, finanzas, recursos humanos y más. Asimismo, Aeroméxico y el sindicato de pilotos están atorados en sus negociaciones.
“Para superar estos tiempos de turbulencia, es esencial convertirnos en una aerolínea más ágil y ligera. Lamentablemente esto nos obliga a replantear nuestra estructura organizacional, lo que implica reducir personal a lo largo de Grupo Aeroméxico”, señaló Conesa.
En nuestro caso, el sindicato no nos ha dado indicaciones, ni la jefatura, señalaron las sobrecargos de STIA. “El único mensaje que hemos recibido fue de Conesa y no nos dio nada de calma”.
