Desde que Interjet anunció que cesaría sus operaciones los días 1 y 2 de noviembre, la aerolínea cerró todos sus canales de comunicación con los usuarios: la página web está caída, las redes sociales han estado inactivas y Carlos del Valle, nuevo director adjunto de Interjet, borró sus cuentas de redes sociales, cuando había permanecido muy activo las últimas semanas.
El 1º de noviembre, poco después de las 19:00 horas, el operador aéreo publicó un mensaje en redes sociales informando que “algunas aeronaves de la compañía entraron en tareas de mantenimiento motivando una reestructuración en los itinerarios de vuelo”, por tanto reiniciaría operaciones comerciales el martes 3 de noviembre, sin embargo, a la fecha, no existe certidumbre alguna de que esto ocurra, ya que no hay comunicación por parte de la empresa con los usuarios, ni trabajadores.
De acuerdo con Aeropuertos y Servicios Auxiliares, Interjet mantiene un adeudo de más de 55 millones de dólares en turbosina, lo que ha derivado en que la compañía estatal niegue cualquier tipo de crédito a la aerolínea, lo que significa que tiene que pagar por anticipado, o al momento, su consumo de combustible. Fuentes de ASA señalaron a medios locales que Interjet aún no ha pagado su consumo de combustible para el 3 de noviembre, otras fuentes confirmaron a A21 que la compañía ya tenía autorización para cargar combustible en Mérida el día de mañana.
Por su parte, los trabajadores mantienen en pie la protesta pacífica que realizarán mañana en las instalaciones del corporativo en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
De acuerdo con fuentes que solicitaron permanecer en el anonimato, la posibilidad de una huelga se ha acrecentado, ya que pese a haber llegado a un acuerdo con sus empleados frente a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, Interjet acumula dos meses sin pago de salarios a sus trabajadores.
