Alaska Air Group reportó una pérdida neta de 431 millones de dólares (mdd) durante el tercer trimestre del año, pronosticando que la caída en la demanda continuará hasta el próximo año.
Pese a los resultados negativos, el grupo con sede en Seattle no descartó la posibilidad de hacer un pedido considerable del modelo Boeing 737 MAX; cabe señalar que tienen órdenes pendientes por 32 aviones, con opción para 37 más.
Durante una conferencia telefónica, los ejecutivos de Alaska aseguraron que no podrán revertir el gasto en efectivo durante el año; no obstante informaron que mantienen 3.7 mil mdd en efectivo disponibles así como 1.8 mil mdd adicionales.
“Estamos mejor posicionados que cualquier otra aerolínea para sobrevivir a esta tormenta”, declaró Brad Tilden, director de la línea.
Seat dreams are made of this! 💺 We believe it’s safe to fly in any seat, but we’re keeping middle seats blocked on mainline flights through January 6, 2021 to help guests feel comfortable flying again. pic.twitter.com/1XiBKMyils
— Alaska Airlines (@AlaskaAir) October 22, 2020
A pesar de una recuperación parcial por el impacto en la demanda, los viajes aéreos domésticos están por debajo de la media de lo registrado en 2019.
Ante ello, Alaska Airlines buscaría una reorganización de flota que le permita ahorrar efectivo durante los próximos años.
Tilden declaró que el cambio de aeronaves más eficientes les proporcionaría un buen retorno de inversión, asimismo se proclamó en favor de arrendar las aeronaves, para evitar un gasto inicial.
