El volumen de pasajeros transportados entre México y Estados Unidos creció 7.2 por ciento en 2016, al pasar de 25.2 millones a poco más de 27 millones de pasajeros, según datos la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).
De enero a diciembre del año pasado se realizaron 250 mil 633 vuelos, lo que significó un alza de 2.4 por ciento adicional en comparación con las 244 mil 757 operaciones registradas en 2015.
Derivado del Acuerdo Bilateral de Transporte Aéreo entre México y Estados Unidos, diversas aerolíneas norteamericanas aprovecharon la apertura del mercado para ingresar a cielos nacionales.
Tal fue el caso de Southwest Arlines que inició operaciones desde Los Ángeles a Los Cabos, Puerto Vallarta y Cancún, aunando a las rutas Houston-Los Cabos y Denver-Puerto Vallarta.
American Airlines, por su parte, inauguró la ruta Los Ángeles- Cancún y Los Ángeles-Puerto Vallarta; mientras que Delta Airlines comenzó operaciones entre Nueva York y Cancún; Kansas City-Cancún y Los Ángeles- Los Cabos.
En cuanto a las aerolíneas nacionales, Aeroméxico comenzó la comercialización de las rutas Ciudad de México-Austin y Monterrey – Denver.
Interjet, anunció rutas desde Los Ángeles y Chicago con destino directo a la Ciudad de México, así como otras tres rutas entre la capital mexicana, Guadalajara y Monterrey hacia a Las Vegas; y dos rutas más entre Nueva York y Los Ángeles con destino a Cancún, por mencionar sólo algunas.
Volaris también anunció nuevas rutas hacia la Unión Americana, entre las que destacan Monterrey-Chicago; Dallas-Monterrey; Durango-Los Ángeles y desde Guadalajara hacia Seattle, San Francisco y Austin.
“La tendencia de crecimiento seguirá dándose aún con el difícil panorama económico y político entre ambas naciones”, señaló Fernando Gómez Suárez, consultor independiente de aviación.
En entrevista con A21, el especialista reconoció que dicho mercado puede tener una ligera contracción durante los primeros meses del año, derivado de la volatilidad del peso frente al dólar.
“Siempre hay una contracción cuando existe una depreciación monetaria, sin embargo esta será mínima debido a la capacidad adquisitiva que tiene el mercado”, sostuvo.
