El nuevo emplazamiento a huelga lanzado por los pilotos de Air France, y que ocurriría del 24 al 27 de junio, obligó a que Jean-Marc Janaillac entrara a moderar un poco antes de lo planeado. El futuro presidente de Air France y KLM, quien oficialmente entrara en funciones el 4 de julio, se encontró con los representantes del SNPL, del SPAF y de Alter (los tres sindicatos) el 21 de junio. Obtuvo como resultado la promesa de que los pilotos no entraran a huelga antes del 1 de noviembre, dándole tiempo suficiente para elaborar un proyecto estratégico para atender sus demandas.
En cambio, Janaillac cedió en el programa Transform y propuso una “suspensión inmediata” en la restructuración de los planes económicos de la empresa. Entre las medidas que ya no serán aplicadas, una iba a entrar en vigor a principios del mes de junio: una disminución en el aumento de las horas laborables de noche, del 50 al 40 por ciento.
La oficina central ha decidido aceptar esta mano extendida, lo que confirma su voluntad de comenzar una nueva era en la historia de esta compañía” indicaron los sindicatos en un comunicado. Sin embargo, advierten que mantendrán sus seis reclamaciones y que no dejarán de presionar a la dirección.
Las reivindicaciones por las que luchan los pilotos, se refieren en particular a las actividades entre Air France con Hop! Y Transavia y Air France con KLM. Los pilotos demandan un crecimiento de la actividad de Air France, para sí mantener su posición dominante dentro del grupo franco-holandés. Acerca del tema, Frédéric Gagey actual presidente y director general de Air France respondió ayer en la mañana que la situación financiera del grupo de aerolíneas comienza a mejorar, pero que aún no es lo suficientemente sólida como para permitir un crecimiento rápido. Sobre todo, si los resultados positivos son continuamente afectados por las huelgas.
El presidente de Air France igualmente indicó que las negociaciones sobre el reparto de actividades entre Air France y KLM no puede tener lugar antes del otoño, al tiempo que Jean-Marc Janaillac entre a su nuevo puesto. Gracias a que Janaillac intervino antes de lo previsto, se aseguró cuatro meses de paz social con sus pilotos, y así podrá profundizar y desarrollar una nueva estrategia. Sin embargo, “el peso de esta decisión hace que la responsabilidad que cae sobre los hombros de Janaillac sea ahora más pesada. Y el riesgo de una eventual decepción por parte nuestra es aún más grave”, advirtieron los sindicatos.
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