El equipo de control de la misión Aeolus en Alemania concluyó una larga semana de complejas operaciones para lograr el primer reingreso asistido de este satélite, del mismo nombre.
En la Sala de Control Principal, ingenieros cualificados y expertos en desechos espaciales trabajaron conjuntamente para llevar de regreso a la Tierra el satélite de la Agencia Espacial Europea (ESA).
Durante el proceso, se llevaron a cabo varias maniobras críticas para dirigir el satélite eólico de manera segura hacia nuestro planeta. Se prevé que alrededor de los 80 km de altura, gran parte del satélite se quemará, aunque algunos fragmentos podrían llegar a la superficie terrestre.
Los expertos explicaron que, el riesgo general de que ocurran reingresos de satélites es muy bajo. De hecho, el peligro de que un individuo sea golpeado por un fragmento de basura espacial es tres veces menor que el riesgo de ser impactado por un meteorito.
Este logro representa un importante avance por parte de la ESA en el intento de garantizar el regreso seguro de satélites activos que no fueron originalmente diseñados para un reingreso controlado.
Una vez completada la operación, Aeolus, que actualmente está apagado, será entregado a la Oficina de Desechos Espaciales para su disposición adecuada.
