La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) emitió una nueva normativa final para la certificación y formación de pilotos e instructores que operarán aeronaves de despegue y aterrizaje vertical (VTOL), una categoría completamente nueva de aeronaves civiles que incluye taxis aéreos y servicios de transporte de carga. Este avance es el primero de su tipo desde la introducción de los helicópteros en los años 40.
La normativa establece los requisitos operativos y las altitudes mínimas seguras, así como las condiciones de visibilidad necesarias para garantizar operaciones seguras en áreas urbanas y rurales.
Esta es la última pieza clave para la integración de estas aeronaves, que combinan características de aviones y helicópteros, en el espacio aéreo de manera segura.
“La FAA continuará priorizando la seguridad mientras integramos nuevas tecnologías y operaciones. Esta normativa histórica permitirá que las aeronaves de despegue y aterrizaje vertical operen de manera segura en nuestro espacio aéreo”, afirmó Mike Whitaker, Administrador de la FAA.
“Estas aeronaves representan la primera nueva categoría en casi 80 años, allanando el camino para la movilidad aérea avanzada (AAM) a gran escala”.
El año pasado, la FAA publicó una hoja de ruta sobre cómo operarán los vehículos de Movilidad Aérea Urbana, un componente clave para la maduración del concepto de AAM. Con esta nueva normativa, se establece un marco para certificar a los primeros pilotos e instructores especializados en aeronaves de despegue y aterrizaje vertical.
Entre los aspectos más destacados de la normativa: Introduce cambios a regulaciones existentes y establece una Regulación Especial de Aviación Federal (SFAR) con nuevos requisitos de certificación y formación; Aplica normas de operación de helicópteros en algunas fases de vuelo y adopta un enfoque basado en el rendimiento para ciertas reglas operativas, y Permite que los pilotos se entrenen con un solo conjunto de controles de vuelo, eliminando la obligación de tener controles separados para el instructor y el estudiante.
Esta normativa marca un paso crucial para la integración de operaciones innovadoras como los taxis aéreos, servicios de ambulancia aérea y transporte de carga, ampliando las oportunidades para comunidades urbanas y rurales.
