Los trabajadores que pertenecen a la industria aérea solicitaron al Senado de la República que incluyan salvaguardas y que se establezca una política aeronáutica para que lo ratificado en el convenio realmente resulte en beneficio de la industria nacional, tal como lo solicitó el Ejecutivo.
El personal, agrupado en el Frente por la Defensa de la Aviación Nacional (FDAN) solicitó a los senadores que recomiende a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y a la Secretaría de Relaciones Exteriores la creación de un grupo de expertos, en el que se incluya a la industria aeronáutica, que se encargue de revisar anualmente los resultados, a semejanza con el convenio firmado entre Estados Unidos y la Unión Europea, que se revisa cada seis meses.
“El objetivo de este grupo será la corrección oportuna de términos estipulados en el Convenio, o en su caso, de resultados inequitativos que impidan garantizar las oportunidades justas e iguales, tal como lo establece el Convenio de Chicago”, declaró el capitán Miguel Ángel Valero, presidente del FDAN.
A la par, el FDAN solicitó a los senadores que no renuncien a su facultad para aprobar o rechazar nuevas condiciones de apertura en materia de derechos de tráfico y que recomiende a la SCT la vigilancia oportuna de las tarifas para evitar competencia predatoria o prácticas desleales, debido a que el nuevo convenio estipula que las autoridades y las aerolíneas de ambos países decidirán las rutas, tarifas y capacidad que ofrecerán, así como las alianzas comerciales a concretar.
Al mismo tiempo, el equipo conformado por trabajadores y expertos de la industria, solicitó al Senado que exhorte al Ejecutivo Federal demorar la entrada en vigor del Convenio hasta que no concluyan los procedimientos de investigación y sus resolutivos por parte de la Comisión Federal de Competencia Económica que involucran a la industria.
“El gobierno federal mexicano ha tomado una decisión que cambiará, en breve tiempo, la competitividad de la industria aérea nacional, el cambio podrá ser positivo si se adopta una Política Aeronáutica en la que, tanto el gobierno como la industria mexicana establezcan estrategias sólidas, con planes de crecimiento y expansión de los servicios mexicanos en los mercados extranjeros, consolidando operaciones con mayor cobertura en rutas, dinamizando la infraestructura aeroportuaria y modernizando los servicios de navegación aérea”, declaró Valero.
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