Con el propósito de reducir los tiempos de embarque en los aeropuertos, Airbus patentó las cabinas desmontables, un sistema que permite desmontar una parte del fuselaje utilizado por pasajeros y equipaje para ser sustituido por otro con distintos viajeros y maletas, una vez que aterrizó la aeronave.
La idea del mayor fabricante de aeronaves del mundo es que los usuarios estén en espera el menor tiempo posible, y con ello se eleve la productividad y ganancias de las aerolíneas.
Aún cuando este proyecto en el papel representa una idea futurista, se enfrenta a varios obstáculos, que se deberán resolver antes de implementarlo de manera comercial.
Las posibles adecuaciones implicarían modificar la infraestructura de los aeropuertos para cumplir con los protocolos de seguridad de la industria.
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