Asistentes de vuelo de una docena de aerolíneas luchan por llegar a nuevos acuerdos contractuales
Más de 160 legisladores estadounidenses instaron a la Junta Nacional de Mediación a tomar medidas para ayudar a unos 80,000 asistentes de vuelo a alcanzar nuevos acuerdos contractuales.
Los asistentes de vuelo de United Airlines, American Airlines, Alaska Airlines y Frontier se encuentran entre los trabajadores de más de una docena de aerolíneas que aún luchan para llegar a nuevos acuerdos contractuales.
Las aerolíneas y la junta no hicieron comentarios ni respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios sobre la carta, informó Reuters.
El grupo bipartidista de 168 legisladores encabezado por la representante demócrata Melanie Stansbury dijo que los asistentes de vuelo han estado atrapados en negociaciones contractuales prolongadas durante años e instó a la junta "a utilizar todas las herramientas a su disposición para fomentar la resolución de estas negociaciones".
Otros firmantes de la carta incluyen a los representantes Brian Fitzpatrick, Debbie Dingell, Donald Norcross, Steven Horsford y Mark Pocan.
“Los plazos son críticos para las negociaciones. Las aerolíneas han retrasado las mejoras obtenidas hasta cinco años mientras premiaban a los directores ejecutivos y otros ejecutivos”, dijo Sara Nelson, presidenta internacional de la Asociación de Auxiliares de Vuelo (CWA), que representa a más de 50,000 en 20 aerolíneas.
"Claramente, se necesita una amenaza de huelga creíble para resolver estas disputas", agregó.
El mes pasado, los asistentes de vuelo y la gerencia de United estuvieron en una nueva ronda de negociaciones mediada por el gobierno federal después de dos años de negociaciones.
Según la Ley Federal que rige la industria aérea, los asistentes de vuelo no pueden hacer huelga sin el permiso de la junta. Los legisladores señalaron que "sólo ha habido dos liberaciones a la huelga de trabajadores de aerolíneas desde 2006, la última fue la de los pilotos de Spirit Airlines en 2010, en comparación con docenas en las décadas de 1980 y 1990".
Stansbury dijo en una entrevista que los asistentes de vuelo tienen pocas opciones y los legisladores quieren que la junta permita las huelgas.
"Básicamente están estancados. Nadie quiere ver una huelga en la industria aérea, lo que afectaría nuestra economía, pero sin la capacidad de nuestros trabajadores para negociar colectivamente, básicamente la industria aérea se está aprovechando y explotando", añadió.
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