La empresa británica Rolls-Royce anunció que detectó un problema de durabilidad en “un pequeño número de los motores de larga vida del Paquete B”. Originalmente este problema se había detectado en los motores Trent 1000 Paquete C.
El motor Trent 1000 fue diseñado específicamente para el B787 Dreamliner.
A inicios de este año, All Nippon Airways descubrió que los álabes de sus motores presentaban señales inusuales de corrosión, uso y desgaste por lo que informaron a Rolls-Royce.
A partir de abril de 2018, la empresa británica determinó que los motores afectados eran los del Paquete C. Dos meses después, descubrió que también los del Paquete B cuentan con problemas similares, por lo que buscarán la forma de proceder.
Cerca del 25% de todos los Dreamliners que actualmente están en el aire tienen motores Trent 1000 Paquete C. Repararlos tomará cerca de tres años y un costo estimado de 454 millones de dólares, ha dicho Boeing. Aún no informan sobre cuántas aeronaves tienen motores del Paquete B.
Por motivos distintos, Rolls-Royce también planea hacer un recorte de personal y despedir hasta cuatro mil empleados esta semana, en sus planta en la ciudad inglesa de Derby.
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