Buscan resolver problemas de seguridad de aeronaves y garantías en la cadena de suministro
Directivos de varias aerolíneas solicitaron una reunión con miembros de la junta directiva de Boeing, esto sucede bajo el contexto de que la industria de la aviación lucha por hacer frente a las repercusiones de la expulsión de la puerta tapón del 737 MAX 9 de Alaska Airlines el pasado 5 de enero de 2024.
Según el diario Wall Street Journal, quien consultó a personas familiarizadas con el tema, los directores ejecutivos están frustrados con los problemas de producción en Boeing resultantes de que el fabricante de aviones tuvo que abordar cuestiones de seguridad en sus instalaciones a raíz del incidente de Alaska Airlines.
En tanto, Boeing está bajo presión para presentar un plan de acción integral para mejorar la seguridad a la Administración Federal de Aviación (FAA), luego de una auditoría de seis semanas de su fábrica durante la cual se descubrieron múltiples fallas.
En respuesta a los llamados de los jefes de las aerolíneas para discutir cómo volver a encarrilar la situación, Boeing acordó enviar miembros de la junta directiva para reunirse con ellos la próxima semana.
El director ejecutivo de Boeing, David Calhoun, no estará presente, aún así Boeing dijo al Wall Street Journal que apoya plenamente la medida.
"Nos hemos centrado activamente en escuchar a nuestros clientes en todos los niveles de nuestra empresa", dijo un funcionario de Boeing al periódico citado.
Mientras tanto, Alaska Airlines, Southwest Airlines, American Airlines y United Airlines están esperando las entregas de aviones que ahora enfrentan retrasos.
Boeing entregó alrededor de 40 aviones 737 MAX al mes a finales de 2023, pero se espera que esta cifra caiga a cerca de 15 en los próximos meses.
FBI se acerca a pasajeros del 737-9 de Alaska
Por otro lado, el periódico Seattle Times informó que el FBI se comunicó con los pasajeros que estaban a bordo del avión de Alaska Airlines involucrado en el incidente de enero.
La fiscalía, que está llevando a cabo la investigación criminal recientemente anunciada por el Departamento de Justicia sobre Boeing, dijo a los pasajeros, a través de una carta, que pueden ser “posibles víctimas de un delito”.
La carta también brinda a los pasajeros un enlace para registrarse para recibir actualizaciones sobre el caso y una dirección de correo electrónico para comunicarse con el FBI.
El vuelo 1282 de Alaska Airlines sufrió una rápida descompresión cuando la puerta tapón izquierda de la mitad de la cabina se separó del avión a 16,000 pies el 5 de enero de 2024, tras el incidente, la aeronave tuvo que aterrizar de emergencia.
Tanto la FAA como la Junta Nacional de Transporte Aéreo iniciaron investigaciones en contra de Boeing.
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