Debido a los problemas que ha enfrentado Rolls-Royce en la manufactura de las turbinas del A380, Emirates y Airbus llegaron a un impase en su acuerdo para que el consorcio europeo provea a la aerolínea emiratí de 36 unidades de este superjumbo, señaló un reporte de Bloomberg.
Si las conversaciones no se destraban, esto podría poner en peligro la continuidad de la familia A380, el avión comercial más grande del mundo.
De acuerdo con el medio estadounidense, Emirates y Rolls-Royce están negociando el precio y el gasto de combustible de los motores, luego de que la empresa inglesa tuviera problemas en entregar los resultados prometidos con sus turbinas.
Dichas pláticas han rebasado la fecha límite para seleccionar qué motores impulsarán los A380, por lo que es posible que se retrase la entrega del primer avión, propuesta inicialmente para 2020.
Cabe resaltar que hay otra empresa que fabrica motores para el A380: Engine Alliance (surgida de la alianza de General Electric y Pratt & Whitney). De hecho, Emirates trabajaba originalmente con ellos, pero eventualmente decidió cambiar a Rolls-Royce, para el suministro de su orden de 36 aviones.
No obstante, fuentes cercanas al tema señalaron a Bloomberg que Engine Alliance no está buscando obtener el contrato con Emirates, debido a que no han tenido un pedido por motores para el A380 en años y han decidido poner su atención en otros programas.
Otras aerolíneas, además de Emirates, que utilizan las turbinas de Alliance son Etihad, Qatar Airways, Korean Air Lines y Air France.
En enero de 2018, la aerolínea emiratí concretó una orden en firme por 20 de estos aviones por un valor total de 16 mil millones de dólares, y con opción de compra a otras 16 unidades. De hecho, de la actual cartera de pedidos del A380, cerca de la mitad pertenecen a Emirates, la mayor operadora a nivel mundial del súper jumbo.
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