La carta de protesta dirigida al presidente de Lufthansa, Carsten Spohr, dada a conocer por el diario Bild, ha sido el detonante de la polémica entre representantes de la aerolínea y 32 familiares de las víctimas de la tragedia del Airbus 320 Germanwings, estrellado deliberadamente en marzo pasado.
Los familiares de las víctimas solicitan una disculpa de parte del presidente de la aerolínea, argumentando que él no ha hablado personalmente con ellos, ni se ha disculpado por lo sucedido con sus conocidos: "Estuvieron ahí para sus clientes, pero no para nosotros".
También expresaron su indignación por el maltrato que dicen haber recibido por parte de Lufthansa, grupo al que pertenece la aerolínea Germanwings, al calificar de insultante la indemnización que se les ofrece, 25 mil euros por cada fallecido y otros 10 mil euros a cada familiar directo.
Por su parte, un portavoz de la empresa señaló que Spohr habló con muchos familiares de las víctimas, aceptó totalmente la responsabilidad y se disculpó por el sufrimiento causado a las familias. Agregó que se enviaron cartas de condolencias firmadas por el ejecutivo y que las negociaciones no han concluido, especificando que la compañía ya ha pagado una suma superior a la mencionada por los familiares: "De media, ya han recibido más de 100 mil euros. Y esta suma puede ascender hasta un millón de euros, sí la víctima era el único sustento de una familia."
El 1 de julio, Lufthansa anunció a través de un comunicado, que decidía asumir la responsabilidad social de los familiares de las víctimas, niños y adolescentes, que hubiesen perdido a uno o dos de sus padres, recibirían un apoyo a largo plazo para su educación. La aerolínea destinarán 13.8 millones de euros a la pérdida.
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