Los aeropuertos europeos conmemoraron el vigésimo aniversario de la mayor expansión de la Unión Europea hasta la fecha, compartiendo datos sobre el impacto positivo de una mayor integración que impulsa la demanda de transporte aéreo y fortaleciendo la cohesión social en toda Europa.
El 1 de mayo de 2004 marcó un hito histórico cuando 10 países se unieron a la Unión Europea como nuevos Estados miembros: Chipre, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Malta, Polonia y la República Checa. Esta ampliación aumentó significativamente la población (+20%), el territorio cubierto (+18%) y el Producto Interno Bruto (+9%) de la Unión Europea.
Un nuevo análisis realizado por el Consejo Internacional de Aeropuertos de Europa (ACI Europa) señala que los beneficios se extiendieron también a la conectividad aérea, evidenciando una convergencia continua entre los 15 Estados miembros originales de la UE (UE15) y los 10 nuevos Estados miembros adherentes (A10) en términos de demanda de transporte aéreo en los años posteriores a la ampliación.
La adhesión a la UE desempeñó un papel fundamental en el incremento del transporte aéreo en los países candidatos, lo que resultó en una expansión rápida de la conectividad aérea y un crecimiento de pasajeros considerablemente superior al de los países de la UE15.
Esta mejora en la conectividad aérea acercó aún más los aeropuertos europeos a sus respectivas comunidades, como lo indica el Índice de Conectividad de ACI Europa, que muestra un aumento del 85% en la conectividad aérea directa de los países A10 desde su adhesión, en comparación con un aumento más constante del 32% en los Estados miembros de la UE15.
Este crecimiento dinámico en los países en proceso de adhesión, que se atribuye a varios factores fortalecidos por la ampliación, como el desarrollo económico, la mejora de infraestructuras y una mayor integración en el mercado de la UE, es notable.
De 2004 a 2019, los viajeros aéreos aumentaron en un impresionante +215% en los países candidatos, mientras que los países de la UE-15 continuaron creciendo a un ritmo más moderado (+77%), lo que indica una madurez de mercado previa a la ampliación.
Esta significativa mejora en la conectividad aérea tuvo un impacto económico considerable, ya que cada aumento del 10% en la conectividad directa de un país obtuvo un incremento del +0.5% en su PIB per cápita. Además, en 2019, la proporción entre la población y los pasajeros aéreos en los países candidatos disminuyó significativamente, lo que contribuyó a fortalecer la cohesión en toda la UE al permitir que más ciudadanos tuvieran acceso al transporte aéreo.
Olivier Jankovec, director general de ACI Europa, destacó la importancia histórica de la ampliación de 2004, resaltando el papel crucial de la aviación en el fortalecimiento de las libertades esenciales de la UE, como la libre circulación y la libre prestación de servicios.
Subrayó que la dinámica expansión de la conectividad aérea y el aumento de pasajeros han generado un círculo virtuoso, impulsando la convergencia y dinamizando las economías del bloque ampliado.
En un contexto geopolítico desafiante, marcado por una nueva oleada de ampliación de la UE, Jankovec enfatizó la relevancia de los datos compartidos para los países candidatos y la UE en su conjunto, subrayando la importancia de mantener la conectividad aérea sostenible y competitiva como una prioridad máxima en el próximo ciclo político de 5 años, tanto para los pasajeros y las comunidades, como para el medio ambiente.
En enero pasado, ACI Europa presentó a las instituciones de la UE una serie de recomendaciones estratégicas y solicitudes de políticas de transporte, enfocadas en tres prioridades clave: la descarbonización efectiva de la aviación, la preservación del mercado único de la aviación y el impulso de aeropuertos resilientes, digitalizados y ecológicos.
