China entró con éxito en la industria aeronáutica civil, con el primer vuelo comercial de su avió regional, el ARJ21.
Esta aeronave con motores a reacción, de la compañía Chengdu Airlines, realizó el trayecto entre Chengdu, capital de la provincia de Sichuan, y Shanghai, con 70 pasajeros a bordo.
Según la prensa del país asiático, este avión es un hijo del antiguo, McDonnell Douglas MD-80, que fue producido bajo licencia en China con equipos traídos desde Estados Unidos.
La distribución de motores es muy semejante al avión mencionado con los dos motores traseros, uno a cada lado del fuselaje.
La idea original de China, es ser competidor directo de la brasileña Embraer y de la canadiense Bombardier, y hasta el momento, la Corporación de Aeronaves Comerciales de China (COMAC), ha recibido más de 300 pedidos de 19 aerolíneas.
Estos encargos han sido principalmente de aerolínea chinas, pero también hay en la lista de pedidos, compañías aéreas de Asia y de África.
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