El uso de combustibles sostenibles de aviación (SAF) no será la solución total para la descarbonización de la industria aérea de cara al futuro, sino que es apenas uno de los pilares en el camino para solucionar estos retos, señaló Scott Kirby, director general de United Airlines.
Hay otros pilares como la neutralización de las emisiones de carbono y el desarrollo de nuevas tecnologías como la electrificación y el hidrógeno. Aunque habrá un rol para la aviación impulsada por energía eléctrica e hidrógeno, particularmente en vuelos cortos y regionales, el directivo augura que será necesario seguir utilizando combustibles fósiles para operar aviones grandes en largas distancias.
“Salvo que haya un descubrimiento impresionante en el tema de los biocombustibles, como por ejemplo con el uso de algas, no lograremos todos nuestros objetivos con el SAF. Por eso, la habilidad de esta industria para descarbonizarse no depende únicamente de los biocombustibles”, indicó en una entrevista publicada por la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA).
El objetivo con la bioturbosina es lograr la colaboración entre industria y gobiernos para poder rebajar los precios en la producción de los combustibles sostenibles de aviación, indicó el titular de United Airlines.
“Es crítico que impulsen las inversiones, reduzcan los precios y mejoren la confianza de los consumidores, así como hicieron en su momento con la energía solar y eólica”, puntualizó Kirby. La tecnología para crear SAF no es compleja, pero lo que se necesita es que haya inversión que permita reducir los costos y se escale la producción, finalizó.
