Se pavimentó un tramo de carretera con bioasfalto y el otro de manera convencional, al circular los vehículos permitirá obtener datos equilibrados y comparables
El operador aeroportuario Fraport junto con la startup “B2Square – Bitumen Beyond Oil” están realizando pruebas con un asfalto sostenible en un tramo de carretera de 200 metros de la zona de plataformas del aeropuerto.
Esta sería la primera vez que se emplea un asfalto orgánico basado en cáscaras de nuez de la India en un aeropuerto.
El betún (aglutinante) es esencial en la construcción de carreteras y, por lo general, se obtiene como subproducto de la destilación del petróleo crudo. Luego se mezcla con agregados minerales para producir asfalto. En este caso, B2Square combina una resina hidrocarbonada natural con un extracto orgánico obtenido al prensar cáscaras de nuez de la India, creando así un asfalto sostenible.
Explicó que este material biogénico es más duradero y amigable con el clima que el asfalto convencional. Los árboles de nuez de la India, como todas las plantas, extraen dióxido de carbono de la atmósfera, y el CO2 almacenado en las cáscaras es neutralizado y luego fijado en el pavimento. El método de baja temperatura utilizado para colocarlo también reduce el consumo de energía, mejorando así el balance climático.
“Consideramos que este bioasfalto innovador, basado en betún orgánico, es una posibilidad fascinante para reducir la huella de carbono del Aeropuerto de Frankfurt”, afirmó Andreas Eibensteiner, del Departamento de Gestión Ambiental de Fraport AG.
Añadió que el enfoque principal en la terminal está en evitar emisiones de CO2 en las áreas de impacto directo, prestando mayor atención a las emisiones de alcance 3, incluidas aquellas causadas por actividades de construcción.
“Si este pavimento innovador cumple con nuestros estrictos requisitos de calidad, las zonas de plataforma del aeropuerto tienen un gran potencial para implementar este proceso. Para combatir el cambio climático de manera efectiva, debemos pensar fuera de lo convencional y probar enfoques ingeniosos como este”, aseveró Eibensteiner.
Además, al usar bioasfalto, Fraport ya cumple con las nuevas leyes que, a partir de 2025, limitarán la exposición a vapores y aerosoles en los lugares de trabajo.
En la planta de asfalto de Kelsterbach, cerca del aeropuerto, el material se mezcla con roca triturada y se transporta a las obras de construcción. El tramo de prueba está ubicado en la parte sur de la plataforma del aeropuerto. Fraport AG pavimenta un lado del tramo con bioasfalto y el otro con asfalto convencional. Los vehículos circularán de un lado al otro, lo que permitirá obtener datos equilibrados y comparables.
El laboratorio independiente HNL Ingenieur- und Prüfgesellschaft mbH, en Aschaffenburg supervisa el proyecto.
“Durante los próximos dos años esperamos obtener información valiosa sobre la durabilidad de este asfalto sostenible. Las inspecciones se realizarán cada seis meses, evaluando parámetros clave como el nivel de compactación y el contenido de vacío en el asfalto. La continuación del uso del bioasfalto dependerá de los resultados”, afirmó Axel Konrad, gerente de proyecto del departamento de Gestión de Infraestructura Central de Fraport AG.
De esta manera, a más tardar para 2045 el Aeropuerto de Frankfurt y todas las instalaciones consolidadas de Fraport operarán sin emisiones de dióxido de carbono.
Además, en 2030, el operador habrá reducido las emisiones en su sede principal a 50,000 toneladas anuales. Las actividades de protección climática se basan en un plan de descarbonización adoptado en 2023 para todo el grupo corporativo.
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