Después de que el Concorde impusiera diversos récords de velocidad al cruzar el Atlántico en su ruta Londres-Nueva York, actualmente, la moda de la velocidad regresa a la aviación comercial, con el proyecto de fabricar una aeronave que tarde sólo cuatro horas en realizar ese viaje.
La compañía Boom Technology está apostando sus recursos para fabricar un avión que vuele a 2.2 veces la velocidad del sonido, a más de 2 mil 400 kilómetros por hora.
Con esta aeronave busca también estrechar los tiempos en diversas rutas intercontinentales, como disminuir a sólo cinco horas el viaje de San Francisco-Tokio, que actualmente se hace en 11 horas.
Según un comunicado de la empresa, ya podrían tener un prototipo a finales de 2017. Este proyecto tiene varias aristas a favor, entre ellas, el apoyo del fundador de Virgin Group, Richard Branson.
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