(Con información de Jorge Castellanos)
Como forma de hacer frente a condiciones desafiantes en el mercado, Volaris redujo su expectativa de crecimiento para el 2017 de un 14 a 13 por ciento de capacidad (medida en asientos milla disponibles, o ASM por sus siglas en inglés), un ajuste de casi diez por ciento al considerar el 22 a 23 por ciento de crecimiento en ASM que la compañía proyectó a principios de año.
En su informe financiero de medio año, los directivos de la aerolínea consideraron que “estaban de vuelta en el camino correcto” dentro del mercado aéreo de Norte y Centroamérica, y para ilustrar su optimismo citaron el alza en sus otros ingresos por servicios que, dijeron, ahora representan el 29 por ciento del total de los ingresos operativos.
Esto ubica a Volaris dentro del top cinco mundial de líneas aéreas en términos ingresos no relacionados con el precio del viaje y el porcentaje que éstos representan de sus ingresos totales, explicó Enrique Beltranena, director general de la compañía.
Las claves para este crecimiento fueron el cargo por la primera maleta en vuelos hacia Estados Unidos, los ingresos por nuestra tarjeta de crédito de marca compartida, mejores conversiones de ventas de nuestros combos por servicios adicionales y el aumento de nuestros ingresos por comisiones de productos relacionados”, añadió.
Aún con este aporte proveniente de servicios adicionales, ¿por qué bajar aún más su expectativa de crecimiento, si en marzo pasado ya habían hecho el ajuste al 17-18 por ciento de ASM?
Más vale prevenir...
“Seguimos siendo cautelosamente optimistas sobre la mejora reciente de las condiciones del mercado y, por lo tanto, continuaremos administrando nuestra capacidad en consecuencia”, añadió el ejecutivo al frente de la aerolínea de ultra bajo costo.
Aunado a ello, apuntó que la compañía no ha recibido ninguna nueva aeronave en lo que va del año, por lo que han debido aplicar una disciplina operativa y un firme control de sus gastos.
En otras palabras, y dadas las turbulencias político-económicas con Estados Unidos, así como aquellas provenientes por la presión en sus gastos de operación (por la volatilidad en el tipo de cambio y el incremento en los precios del combustible), tal pareciera ser que Volaris considera mejor obtener una utilidad mínima es que cero utilidad.
Esto se vuelve más claro si se comparan los 388 millones de pesos (mdp) que facturó en el segundo trimestre de 2016, con los 39 mdp de utilidad operativa que obtuvo en el mismo periodo de este año, lo que dejó a la compañía con un margen de operación de 0.6 por ciento, un decremento de 6.9 puntos porcentuales respecto al mismo periodo del año anterior.
Mantendrán cobro de maletas
Para revertir este desempeño, Volaris se apegará aún más a su estrategia de venta de servicios desagregados, pues los 4.1 millones de pasajeros transportados en el segundo trimestre de 2017 (un alza del 11.6 por ciento con respecto al mismo periodo del año anterior), representan una gran oportunidad de ingresos por la política de la aerolínea de aplicar un cobro diferenciado por equipaje facturado.
En conferencia telefónica con inversionistas, Beltranena sostuvo que la compañía ya recibió de parte de las autoridades mexicanas un criterio por escrito que confirma que tanto aerolíneas mexicanas como estadounidenses podrán seguir cobrando a los pasajeros la primera maleta en vuelos al extranjero.
Es de recordar que, en días pasados, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) impuso una multa de 4.5 millones de pesos en contra Volaris por incurrir en “violaciones a diversas disposiciones legales en el cobro de la primera maleta documentada” en los vuelos desde México hacia Estados Unidos y Canadá.
En su momento, la empresa anunció que impugnará ante las instancias judiciales correspondientes dicha sanción que consideró como “desafortunada”.
Adaptación al cambio
Otros temas relevantes del informe de Volaris fueron algunas de las decisiones que sus directivos han debido tomar ante los varios retos a que se ha enfrentado la aerolínea en su operación nacional e internacional durante el segundo trimestre de 2017.
En lo que respecta al mercado transfronterizo, Holger Blankenstein, director comercial de la empresa aérea, reiteró el viraje de la demanda de destinos internacionales hacia rutas de ocio nacionales, en parte como reacción al clima político de incertidumbre entre México y EU.
No obstante, un mejoramiento de la relación bilateral produjo una recuperación en las rutas para visitar a familiares y amigos en el país vecino, particularmente durante Semana Santa, y lo mismo se espera en los meses veraniegos de julio-agosto.
Sobre su operación en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), Beltranena, enfatizó que una eficiente administración de su cuota de mercado (más del 30 por ciento), aunada a la diversificación y expansión de su red de destinos, les ha permitido mantenerse competitivos, aún con la presión de precios y oferta de vuelos proveniente de rivales como Aeroméxico-Delta, alianza que abarca casi el 60 por ciento del mercado en el aeropuerto capitalino y ha apostado fuerte al crecimiento tanto de capacidad como de rutas internacionales.
Finalmente, en lo que respecta al desempeño de su operación centroamericana –vía Volaris Costa Rica–, el ejecutivo apuntó que sus vuelos de conexión entre San José y Guatemala hacia los Estados Unidos con escala en Guadalajara han presentado niveles de ocupación de entre 70 y 80 por ciento en épocas de alta demanda, y de 65-68 por ciento en temporada regular.
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