A nivel nacional, la empresa ATIO Group atiende a 62 aeropuertos con la tecnología para automatizar y controlar la carga de combustible para cada aeronave, explicó Mario Coeto, gerente general de Software de esta compañía.
En entrevista con A21 el gerente explicó que con esta plataforma se permite controlar el abastecimiento del combustible desde que llegan a la planta de distribución hasta el suministro de éste, pasando por el expendio a través de una pipa.
Comentó que esta tecnología que se implementa en un aeropuerto, permite que desde antes de iniciar el proceso de despacho ya se tiene claridad respecto a la asignación de vuelos, la cual tiene que ser muy precisa, para saber qué cantidad se tiene que cargar a cada aeronave y en qué horario. Es decir, dijo, se cuenta con un control de vuelo con la asignación de autotanques que se envían a la posición donde cargarán combustible a las aeronaves.
Coeto detalló que la ventaja de esta tecnología es que se controla el medidor del suministro de combustible, mismo que se detiene automáticamente a los mil litros.
“Si hubiera algún problema de que no le llegara a caber, se puede cortar antes o un sobrellenado, se puede sustraer combustible y todo eso queda registrado en una bitácora para que se vean las transacciones y después se pueda hacer la generación automática del ticket de consumo a las aerolíneas”, dijo.
Con esto, las empresas pueden ver en tiempo real la información, lo que se traduce en un beneficio tanto para el que controla el combustible en el aeropuerto, como para quien lo está consumiendo, afirmó.
El gerente general de Software ATIO Group comentó que los últimos aeropuertos donde implementaron esta tecnología fue en Tulum y en el Felipe Ángeles.
Precisó que cuando se suministra el producto se controla todo el combustible que salga, incluso aplica para aeronaves particulares.
“Tienes tu aeronave privada o tu helicóptero, puedes pagar con tu tarjeta de crédito, se hace el cargo de combustible y se suministra”, precisó.
Añadió que ATIO tienen presencia en 25 aeropuertos en Colombia y en el “Jorge Chávez”, en Lima, Perú.
Indicó que, en México, existe una regulación fiscal, donde las empresas deben tener una trazabilidad del combustible, conocido como “controles volumétricos”, razón por la cual en otros países puede resultar complicado operar con esa tecnología.
“Generamos un archivo diario y una vez al mes se hace un archivo para el SAT -Servicio de Administración Tributaria- el cual debe incluir todas las transacciones que se hacen y todos los medidores deben estar automatizados para saber en qué número empieza y en qué número termina el diferencial de litros.
“Y eso lo estás reportando al SAT para que cada una de esas transacciones esté relacionada con una factura, entonces hay una trazabilidad, y en algunos países de Centroamérica esto no se da tan a detalle, por eso no es tan sencillo la automatización”, dijo. Reconoció que hay países que los buscan, con el fin de evitar el robo de combustible.
Recordó que ATIO nació en 1994 y primeramente se enfocaron en estaciones de servicio a gasolineras. Actualmente tienen más de 6 mil estaciones con esta solución a nivel nacional y a partir de ahí tuvieron más soluciones para el control de combustibles.
ATIO tiene operaciones en autoservicios, navieras, sectores de industria y a partir de que Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) hizo una licitación, porque usaban un producto extranjero con todo el proceso en inglés, y requerían de un producto muy tropicalizado, ahí donde nace FuelGate, que es la aplicación.
FuelGate se desarrolló en México, dijo, está en multilenguaje, principalmente en español e inglés; con esto se le da una seguridad a la aerolínea de que va a recibir el combustible que está pagando.
Lo que ofrecen es una infraestructura en la nube para que desde un servidor, el cliente pueda recibir todas las transacciones que se realizan en los aeropuertos de los diferentes autotanques -que están identificados con un número- para que todo quede registrado debidamente, detalló.
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