Tras dejar en tierra 171 aviones Boeing 737-9 MAX para su revisión, la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) informó que ahora está investigando las prácticas de fabricación y las líneas de producción de Boeing, incluidas aquellas que involucran al subcontratista Spirit AeroSystems, reforzando su supervisión de Boeing y examinando posibles cambios en el sistema.
Desde el viernes, la FAA anunció los requisitos para un riguroso proceso de inspección y mantenimiento como un paso nuevo y necesario antes de que la FAA contemple cualquier paso adicional en el proceso para volver a poner en servicio los Boeing 737-9 MAX.
Indicó que las primeras 40 inspecciones que forman parte de ese proceso ya están completas y la FAA revisará minuciosamente los datos de ellas.
La autoridad aeronáutica indicó que todos los aviones 737-9 MAX con tapones en las puertas permanecerán en tierra en espera de la revisión y aprobación final del proceso de inspección y mantenimiento que satisfaga todos los requisitos de seguridad establecidos.
Será hasta que la FAA concluya la inspección y evalúe el mantenimiento cuando los 737-9 MAX afectados puedan volver a ser operados. “La seguridad del público que vuela, no la velocidad, determinará el cronograma para devolver estos aviones al servicio”, precisó la autoridad.
La FAA está apoyando la investigación de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) sobre el vuelo 1282 de Alaska Airlines. La NTSB está a cargo de la investigación y proporcionará cualquier actualización.
Facebook comments