El galón de combustible en febrero de 2024 fue de 2.83 dólares, 4.8% mayor en comparación con enero de 2024, y 42.9% respecto a febrero de 2019
En febrero de 2024, el costo por galón de combustible de aerolíneas en Estados Unidos registró un aumento del 4.8% con respecto a enero de 2024, mientras que el consumo de combustible de aviación mostró un incremento del 7.9% en comparación con el período pre-pandemia de febrero de 2019.
El Buró de Estadísticas del Transporte (BTS) del Departamento de Transporte de Estados Unidos (EU) reveló que las aerolíneas de servicio programado en el país consumieron 1,392,000 millones de galones de combustible en febrero. Esta cifra representa una disminución del 4.4% respecto a enero de 2024, cuando el consumo fue de 1,456,000 millones de galones, pero un notable aumento del 7.9% en comparación con febrero de 2019, antes de la pandemia.
En cuanto al costo, el precio promedio por galón de combustible en febrero de 2024 fue de 2.83 dólares, lo que significa un incremento de 13 centavos (4.8%) en comparación con los 2.70 dólares de enero de 2024, y un aumento significativo de 0.85 dólares (42.9%) respecto a febrero de 2019.
El gasto total en combustible durante el mes de febrero de 2024 alcanzó los 3,940 millones de dólares (mdd), ligeramente superior (0.3%) al gasto de 3,930 mdd registrado en enero de 2024 y un 53.9% más alto en comparación con el periodo pre-pandemia de febrero de 2019.
Es importante destacar que los costos de combustible para las aerolíneas pueden ser influenciados por estrategias de cobertura, mediante contratos que les permiten limitar su exposición a fluctuaciones futuras en los precios del combustible. Además, cabe mencionar que los datos proporcionados por el BTS no están ajustados por inflación, ni los cambios mes a mes están ajustados estacionalmente.
Este aumento en los costos y el consumo de combustible refleja no solo las dinámicas del mercado energético global, sino también el continuo crecimiento del sector aéreo en el post-pandemia, destacando la resiliencia y adaptabilidad de las aerolíneas frente a desafíos económicos y ambientales.
Los operadores aéreos y los stakeholders (partes interesadas) del sector seguirán monitoreando estas tendencias, que son cruciales para la planificación y estrategias futuras, especialmente en el contexto de la búsqueda por combustibles más sostenibles y eficientes.
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