Operó sus primeros vuelos entre México y Estados Unidos utilizando combustible sostenible de aviación
Grupo Aeroméxico se pronunció a favor de la reciente resolución de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional referente al compromiso a largo plazo de alcanzar las cero emisiones netas de CO2 para el año 2050. Para lograr este objetivo, inició una colaboración a largo plazo con Neste Company, empresa líder de producción y proveeduría de combustibles renovables.
En el marco del Día Internacional Contra el Cambio Climático, celebrado el 24 de octubre, Aeroméxico operó sus primeros vuelos entre México y Estados Unidos utilizando combustible sostenible de aviación. Mediante el uso de este tipo de combustible, redujo 27 toneladas de CO2, equivalentes a las emisiones producidas por tres mil 800 automóviles.
Los vuelos despegaron de San Francisco con destino a la Ciudad de México y Guadalajara, a bordo de aeronaves Boeing 737-800 equipadas con motores GE/Safran CFM56, informó la aerolínea en un comunicado.
Para llevar a cabo estos servicios, la aerolínea del caballero águila adquirió cerca de 40 mil litros de combustible sostenible a Neste Company, elaborado a partir de residuos de grasas animales y aceites vegetales en combinación con turbosina Jet A.
“La reducción de emisiones de CO2 es parte de nuestra estrategia sostenible para combatir el cambio climático. Desde hace más de una década tenemos un programa de eficiencia de combustible que ha permitido disminuir alrededor de 270 mil toneladas de CO2, lo equivalente a la circulación de 105 mil coches al año en la Ciudad de México. Los equipos de operaciones e ingeniería y optimización de Aeroméxico cuidan todos los días estas iniciativas que nos retan como empresa, como industria y contribuyen para un mejor futuro de México y el mundo”, dijo María Dolores PAradis, gerente de Planeación de Proyectos Sostenibles de Aeroméxico.
La aerolínea mexicana es pionera en el uso de estos combustibles en México y Latinoamérica. En 2010 se operaron diversos vuelos con combustibles sostenibles entre México y Costa Rica como parte de la campaña Vuelos Verdes. En 2011 se realizó el primer vuelo transatlántico entre México y Madrid con biocombustible y en 2012 se concretó un vuelo a São Paulo para la conferencia de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas RIO+20, iniciativas del equipo de ingeniería de operaciones de la compañía.
Asimismo, Aeroméxico cuenta con la iniciativa Vuela Verde, un programa voluntario de compensación de emisiones dirigido a pasajeros y colaboradores. Al adquirir su boleto de avión, pueden realizar una contribución de 90 pesos mexicanos que son invertidos en proyectos socio-ambientales certificados para mitigar la huella de carbono de su vuelo.
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