Este viernes, y luego de meses de estar en el ojo del huracán por sus políticas laborales, Ryanair finalmente cedió a la presión que ejercieron sus tripulaciones a lo largo y ancho del viejo continente y anunció que reconocerá a los sindicatos de pilotos que le prestan sus servicios en Irlanda, Reino Unido, Alemania, Italia, España y Portugal.
Mediante comunicado, la aerolínea de bajo costo dijo que llegó a esta decisión para "evitar las molestias que una huelga en la semana de Navidad podría causar a sus clientes".
Asimismo, la compañía irlandesa exhortó a los gremios de los países mencionados a que conjuren las acciones de huelga convocadas para el 20 de diciembre, así como a establecer comités de pilotos en cada base para tratar directamente con Ryanair.
Al respecto, Michael O'Leary, presidente de la empresa aérea, destacó que la razón detrás de este histórico cambio de política es "colocar las necesidades de sus usuarios en primer lugar", y se pronunció a favor de que las nuevas organizaciones de pilotos logren integrarse a estructuras sindicales nacionales una vez inicie el 2018.
Ante el apoyo generalizado que demostraron las plantillas italiana, portuguesa y alemana de Ryanair a la acción laboral convocada por los pilotos irlandeses, era cuestión de tiempo que se les unieran los aviadores españoles, lo que orilló a la empresa aérea a tomar esta medida.
Esta es la primera vez en 30 años de historia que la aerolínea número uno de Europa en términos de pasajeros movilizados permite la entrada de sindicatos a su planta de pilotos.
Sin embargo, esto podría significar un cambio en el esquema de costos de la compañía, que hasta este hecho había recurrido a contratos temporales con agencias independientes para el reclutamiento de sus tripulaciones.
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